Transcripción de la columna en Radio Carve de 26 de julio, 2023
El Derecho Concursal es una herramienta que hemos visto actuar en grandes y pequeñas empresas para lograr reorganizarse o para liquidarse.
Empresas como Motociclo, Pluna, Magnum, entre otras, han pasado por procesos concursales.
Para conversar sobre el Derecho Concursal y entender más a fondo qué implica esto para las empresas, para los acreedores y para el país en general, estamos en contacto con el Dr. Ramiro Arcaus del Estudio Posadas.
¿Qué es el Derecho Concursal?
El Derecho Concursal es la modernización de lo que antes conocíamos como “quiebra”, esta rama del derecho se encarga de regular las situaciones de insolvencia de una empresa o persona, estableciendo los procedimientos a seguir con el objetivo de lograr una reorganización y/o liquidación ordenada de los activos del deudor insolvente.
Esta rama del Derecho también se enfoca en la administración de los bienes del deudor, el pago a los acreedores y la reestructuración de deuda, procurando un equilibrio entre la protección de los intereses de los acreedores y del deudor.
Para dejarlo claro, siempre hay: A) un Deudor concursado que es la empresa en estado de insolvencia, B) los acreedores (es decir, las personas a las que le deudor les debe algo), y C) el síndico o interventor que es quien administrará o coadministrará la empresa concursada.
¿Qué implica esto para las empresas?
Las empresas pueden negociar con todos los acreedores en su conjunto, de tal forma de proponer quitas (descuentos) a la deuda o esperas para el pago. Esto es, pueden proponer pagar el 60% de su deuda en lugar del 100% y/o hacerlo en un plazo determinado a partir del acuerdo. Al mismo tiempo el concurso le da un respiro a la empresa porque está legalmente impedida de pagar sus deudas concursales hasta que se finalicen ciertos trámites y queda protegido frente a posibles embargos y frente a algunas ejecuciones que estén en trámite y el inicio de nuevas por un plazo.
¿Cómo afecta esto a los acreedores?
El acreedor no podrá ejecutar sus créditos salvo excepciones, por lo que, todos los acreedores deberán verificar sus créditos ante el concurso y entrar en esa “ejecución colectiva” que es el concurso, ya sea negociando para aprobar un convenio con el deudor o para rechazar el convenio y que la empresa entre en liquidación. En otras palabras, los acreedores tienen en sus manos el destino de la empresa.
¿Cómo se solicita un concurso?
Siempre se va a requerir de la participación de un abogado tanto para solicitar el concurso como para verificar un crédito dentro del concurso, pero, en términos sencillos, se debe presentar una serie de documentación que demuestre el estado de insolvencia.
Hay dos tipos de concursos, por un lado el Concurso Voluntario: éste es el solicitado por la propia empresa en estado de insolvencia y, por otro lado, el Concurso Necesario: es decir, el solicitado por algún acreedor o interesado. Un acreedor podría solicitar el concurso de una empresa por ejemplo para evitar que otros acreedores mediante ejecuciones individuales consuman todo el patrimonio del deudor, forzando así que necesariamente el deudor deba negociar con todos los acreedores y que se respeten todos los créditos acordes a su proporción.
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Autor
Dr. Ramiro Arcaus